Miles de turistas locales y extranjeros visitan los diferentes pueblos de Michoacán que por décadas se ha constituido como uno de los destinos más atractivos durante las festividades de Día de Muertos, tales son Tzintzuntzan y la isla de Janitzio siendo los más visitados.
Pátzcuaro se viste de cempasúchil para recibir a sus muertos el próximo 1 y 2 de noviembre. Y junto a ellos, miles de turistas que, como cada año, se unen a la celebración en estos días de pan, mezcal y feria. Situado en el corazón del Estado mexicano de Michoacán, el poblado de Pátzcuaro se ha caracterizado por ser un destino lleno de folclor no solo durante los festejos de Día de Muertos: la comarca, de 60.000 habitantes, forma parte del programa turístico federal de Pueblos Mágicos desde 2002, que la convierte en una parada obligada para quien guste del color, la tradición y el bello paisaje.
Desde los muelles del pueblo, a la vista se levanta fastuosa la isla de Janitzio, la más grande de las cinco que presume la laguna. Es aquí, en este enorme montículo poblado, donde se llevan acabo las procesiones de Día de Muertos junto con las demás ceremonias programadas dentro del panteón municipal de la isla. Altares, ofrendas, es lo que el viajante encontrará desde semanas previas a las fechas festivas.
Pátzcuaro sostiene tradiciones legendarias de profundo raigambre. La fiesta de tradición indígena de Día de Muertos, por ejemplo, ha sido nombrada Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad. Este reconocimiento fue otorgado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Se distingue por representar una de las expresiones culturales más antiguas y de enorme relevancia entre grupos indígenas en México. Como cada año, el Gobierno local y del Estado invita a los visitantes a cuidar del espacio público y a mantener respeto de las ceremonias preparadas en la ciudad.