Redacción
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“Falta mucho, y mientras llega yo sólo tengo la música”. Fue uno de los pensamientos que pasaron por la mente del Maestro Pedro Jiménez Rosas cuando se le informó que recibiría un homenaje en el Teatro Manuel Doblado. Sin creerlo necesario, pero agradecido; reconoció que esperaría con ansias la fecha.
Y llegó la noche del miércoles 14 de agosto. Más de 300 personas y un centenar de músicos se dieron cita en el inmueble de la calle Aldama para darle un homenaje por sus más de 60 años de carrera como músico y docente. “Para el Instituto Cultural de León es un orgullo realizar este homenaje y estoy seguro que todos sus dirigidos, sus asiduos escuchas, compartirán este sentimiento y agradecimiento. Y que mejor homenaje que ofreciendo su música y con la música de quienes lo admiran y estiman”, comentó Sebastián Serra, director general del Instituto Cultural de León, al entregar una placa al homenajeado.
Clarinetista y miembro de la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato por más de 50 años, Jiménez ha dedicado toda su vida a la música. Fundador de un sinfín de agrupaciones, incluyendo la Escuela de Música de León, es un referente como intérprete en el clarinete y como formador de ejecutantes.
Las palabras dedicadas al maestro comenzaban a construir lo que sería una noche entrañable, dando paso al programa musical encabezado por el propio maestro dirigiendo a la centenaria Banda Municipal de León. La agrupación interpretó una marcha, un vals y un danzón de la autoría de Jiménez Rosas. La segunda parte del concierto estuvo a cargo de la Banda Perla del Bajío, una agrupación dirigida por Israel Zárate Esparza, alumno de Jiménez; y de la nueva agrupación de la Escuela de Música: la Banda Sinfónica de la EML. Un programa que incluyó a Verdi, Strauss, Korsakov y C. Saint Sanx, entre otros. El homenaje estuvo a cargo de un total de 100 músicos quienes dieron el preámbulo para el concierto
de aplausos que los asistentes ofrecieron de pie al protagonista de la noche.
