Redacción
GtoViaja
Una rica tradición son los dulces confitados de chilacayote, calabaza y durazno que preparó Irma Almaraz Rodríguez durante el 1er Encuentro de Cocineras Tradicionales del Estado de Guanajuato que se realizó en el Parque Guanajuato Bicentenario.
La originaria de la comunidad de Urireo en Salvatierra, Guanajuato, cocinó estos dulces que han sido su fuente de trabajo por más de dos décadas.
“Para la preparación primero se pelan, se parte en pedazos, se ponen en agua de cal, se dejan de cuatro a cinco horas en la cal, se lavan bien y se ponen en agua limpia para que se salcochen. Se dejan enfriar, se pican y nuevamente se ponen en una olla con agua nueva.
Dependiendo de la cantidad que se vaya a hacer va lo mismo de azúcar, de cuatro a cinco kilos de azúcar.”
La cocinera tradicional mencionó que aprendió esta receta por la necesidad de ayudar a su esposo a solventar los gastos de la casa y sacar adelante a sus ocho hijos. De quien aprendió fue de una señora llamada Juanita, quien no le cobró nada por enseñarle.
“Una señora llamada Juanita me enseñó a hacerlos. Llevo 22 años elaborándolo y de ahí mi esposo y yo hemos sacado para que mis hijos sigan estudiando.”
Seguir preparando estos dulces, expresó, es muy importante porque también han funcionado como fuete de apoyo económico, son sabrosos y a mucha gente le gustan.
“Los vendemos en Salvatierra o por encargo de la gente de Estados Unidos que llega al pueblo y se los llevan.”
Su participación en el evento, comentó, es un orgullo porque la gente ve lo que sabe hacer y se lo reconocen.