Redacción
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La ferviente asistencia a la fiesta del espíritu se reunió en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas para presenciar el espectáculo Rock Jazz Chopin, que con un estallido musical inauguró la 40 edición del Festival Internacional Cervantino (FIC).
Cientos de personas se congregaron para celebrar el regreso del festival más importante de Latinoamérica, que como ya es costumbre, cada año impregna de arte y cultura las calles y recintos de Guanajuato. Polonia, uno de los países invitados de honor inició las actividades con un concierto en el que composiciones clásicas de Frédéric Chopin (1810-1849), fueron dotadas con la frescura musical del jazz y los sonidos metálicos del rock.
El espectáculo comenzó con las piezas Fantasía-Impromptu en do sostenido menor, Op. 66 y Andante spianato y Grande polonesa en mi bemol mayor, Op. 22, que fueron ejecutadas por el pianista Karol Radziwonowicz, asimismo, acompañado de la interpretación vocal de Anna Serafińska ofreció A Young Girl´s Wish (Deseo de una jovencita) y Canción de primavera.
Posteriormente, Leszek Możdżer fue ovacionado tras hacer sonar las cuerdas de su piano para ofrecer Impresiones de Chopin, melodía que entre la elegancia armónica de la composición original y la esencia jazzística de Możdżer, animó al público cervantino. Luces en diversos colores iluminaron al solista mientras él se internaba en su ejecución melódica.
La presentación se tornó dinámica y aventurada cuando con teclados, guitarras eléctricas y batería, los seis integrantes del grupo Rock Jazz Chopin entablaron un diálogo sonoro entre las melodías y los doce bailarines polacos que con sus movimientos espontáneos dieron vida a las obras del gran compositor del romanticismo. Al final de una coreografía, los ejecutantes formaron con sus cuerpos la palabra Chopin.
De nuevo, Anna Serafińska hizo vibrar al público con la potencia de su voz presente en las melodías Etude en mi menor, Op. 10 No. 3; Waltz en la menor, Op. 34 No. 2; Prelude en do menor, Op. 28 No. 7; Polonaise en la mayor, Op. 40 No. 1; Mexican song y The Revolutionary Etude, que entre otras fueron parte de una magna celebración.
La esperada noche culminó con alegría, aplausos y estallidos que fueron parte de la gran sorpresa que los artistas polacos prepararon para los asistentes. Sorprendentes luces de bengala en diversos colores brillaron en la oscuridad del cielo, mientras los presentes levantaron la mirada sorprendidos.
Rock Jazz Chopin es un proyecto creado y dirigido por Andrzej Matusiak, dedicado a difundir la obra de Frédéric Chopin. El montaje musical ha viajado a Chicago, Shanghai, Berlín, Cairo, Budapest, Pekín, Zagreb y otras ciudades. Además de interpretaciones fieles a las composiciones originales, la agrupación realiza arreglos encaminados al jazz y el rock.
Andrzej Matusiak ha realizado gran cantidad de montajes, ha organizado diversos festivales en Polonia y producido más de cien proyectos para la televisión. Es un constante promotor de las manifestaciones artísticas polacas en el extranjero. Desde 1990 es director del Stołeczna Estrada, una de las instituciones de cultura más importantes de Polonia.
Leszek Możdżer es uno de los más eminentes músicos polacos de jazz. Ha grabado más de 100 álbumes, entre ellos un concierto para dos pianos con Adam Makowicz ejecutado en Carnegie Hall. Colaboró con Zbigniew Preisner y Jan Kaczmarek para realizar la grabación para la película Finding Neverland, la cual ganó un Oscar por su música en 2005.
Una de las principales cantantes de jazz en Polonia, la vocalista Anna Serafińska ha ganado varios reconocimientos y becas por su labor, en la que combina los estilos clásicos y contemporáneos del jazz con el funk y el soul.
