León, Gto.- La salida a hombros de Sergio Flores de la plaza de toros La Luz fue el remate para una tarde de grandes faenas por parte de todos los alternantes en la Corrida Guadalupana. El diestro tlaxcalteca cortó una oreja a su primero y una más al segundo, para convertirse en el triunfador de la tarde.
El coso leonés registró poco menos de tres cuartos de entrada para apreciar la presentación de Emiliano Gamero, Arturo Macías “el Cejas” y Sergio Flores, quienes lidiaron reses de Peñalba.
Con el que abrió plaza, “Juan Diego”, de 568 kilos, Gamero lució con la monta de “Ilusión” y “Guapo”, imprimiendo la variedad, dio una vuelta al ruedo. El toro también fue enfrentado por los Forcados Amadores de México, cuyo forcado de cara Antoan Hernández realizó una espectacular pega.
Con el segundo de su lote, Emiliano Gamero dio una vuelta al ruedo tras una actuación donde reflejó su nivel y brilló junto a su cuadra en la faena que confeccionó a “Guadalupano”, un torazo de 588 kilos que acometía al caballo sin cesar. Al montar a “Júpiter” en esta faena, el rejoneador se llevó la ovación de los tendidos. En este toro, nueva actuación destacada de los Forcados, encabezados ahora por Juan Pablo Ángeles, en una pega complicada pero bien lograda.
Sin embargo, Gamero falló a la hora de matar en ambos toros.
EL CEJAS, POR LOS APLAUSOS
Dueño de un carisma que lo hace ser arropado por el público, y particularmente en León, Arturo Macías se enfoca en conseguir agradar al respetable. A su primer toro, de nombre “Anda solo”, lo recibió con un farol de rodillas para luego ejecutar una faena variada con el capote y la muleta.
Colocó una gran estocada que le valió un apéndice. Oreja de peso y valía para el aguascalentense, quien había brindado al maestro Polo Meléndez, torero en retiro, en el recuerdo del subalterno don Beto Preciado Meléndez, su hermano recientemente fallecido a los 72 años.
En su segundo toro, el Cejas “toreó al tendido”, arrancando gritos de “¡torero, torero!” cuando ejecutó algunas suertes de rodillas, y desplantes que le valieron la ovación. Sin embargo, al tirarse a matar erró con la espada. Clavó hasta la empuñadura, pero mal colocada y escuchó dos avisos; tras cinco descabellos, se retiró con silencio.
SERGIO MANDA
Con el primero de su lote, tercero de la tarde, Sergio Flores entregó arte y técnica. “Cumplido”, de 500 kilos, embestía bien por izquierda y eso le permitió al tlaxcalteca lucirse con un toreo en redondo. El toro se prestaba para sacarle una buena faena, había mostrado gran bravura ante la suerte de varas, y así lo aprovechó Flores. Pinchó en el primer intento y se reivindicó con un estoconazo, con el que cortó oreja.
Con el toro que cerró plaza, “Curioso” de 578 kilos, Flores dejó la clase y el temple. Estuvo magistral con el acero y cortó su segunda oreja de la tarde. Dio vuelta al ruedo, compartiendo el reconocimiento con el ganadero de Peñalba, Javier Bernaldo de Quirós.
