Redacción
GtoViaja!
La compañía Delfos Danza Contemporánea, de Sinaloa, invitado de honor, presentó Cuaderno de viaje, montaje multidisciplinario que conjuntó el trabajo de los artistas Mario y Claudia Lavista, durante la 40 edición del Festival Internacional Cervantino (FIC).
Cuaderno de viaje es una propuesta poética cargada de simbolismos, constituida como una retrospectiva de danza y música en vivo, conformada por siete piezas: Cuando los disfraces se cuelgan, Lamento, Reflejos de la noche, Memoria ciega, Resonancias, Jardín de piedra y Territorios perdidos.
El montaje presentó múltiples visiones que pueden ser descritas como las notas de un diario que captura las emociones que se agolpan en cada una de las situaciones que se viven.
En Cuando los disfraces se cuelgan, los intérpretes danzan representando la búsqueda de la identidad, que emerge cuando los sujetos se despojan de las máscaras para interactuar con su realidad. A pesar de los disfraces, siempre hay una esencia y un redescubrimiento del interior.
Lamento (a la memoria de mi abuela) incluyó la improvisación con flauta baja de la composición Lamento por la muerte de Raúl Lavista, de Mario Lavista. Después, Reflejos de la Noche, pieza para cuarteto de cuerdas, que estuvo basada en un poema de Xavier Villaurrutia. Los bailarines formaron pequeños grupos y cruzaron de manera fúrica el escenario, con un cambio de humor y velocidad que llevó al público a sentir la metamorfosis del momento.
En Memoria ciega, el escenario estuvo dispuesto con estructuras rectangulares color plata que jugaron un papel importante en la obra ya que los intérpretes interactuaron con ellas en una especie de viaje por un laberinto, como lo es la memoria misma.
El recorrido continuó con Resonancia, en la que los códigos corporales se mantuvieron como medio para manifestar la exploración de la memoria y las relaciones interpersonales. Jardín de piedra siguió con la introspección. Una bailarina desarrolló en el escenario movimientos juguetones que invitaron a recordar la infancia. La pieza es un tributo de Claudia Lavista a su padre.
Para cerrar, se presentó Territorios perdidos, en esta última los bailarines lucieron una imagen urbana al portar traje y corbata para ejecutar movimientos enérgicos y dinámicos alrededor de un portafolio. Para la parte musical de esta ultima parte corrió a cargo de Psappha Ensamble de Percusiones. Esta pieza escribió la nota final del cuaderno, que llevó al público a una introspección sobre la vida, la memoria y los cambios.
Al final de la presentación la Lidia Camacho, directora del Festival Internacional Cervantino, otorgó un reconocimiento a la compañía por sus 20 años de trayectoria.
En el proyecto participaron instrumentistas de la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes (OSSLA), quienes ejecutaron la música en vivo. Asimismo Eloise Kazan y Johnny Millan crearon el diseño de vestuario y la escenografía, respectivamente; Renato González realizó el video y Víctor Manuel Ruiz la iluminación.
La compañía Delfos Danza Contemporánea, residente del Teatro Ángela Peralta de Mazatlán, fue fundada en 1992 por los coreógrafos y bailarines mexicanos Víctor Manuel Ruiz y Claudia Lavista con el objetivo de abrir un espacio para el intercambio, la formación y el diálogo, a través de la danza contemporánea.
Ha creado más de 60 obras que se han presentado en diversos teatros y festivales de Brasil, Bolivia, Canadá, Ecuador, España, Estados Unidos, Francia, Grecia, Italia, Perú, República Dominicana, Singapur, Sudáfrica y Venezuela. Ha ganado múltiples reconocimientos como el Premio Nacional de Danza (en 1992, 1997 y 2002), el galardón de la Unión de Críticos y Cronistas de México a la Mejor Compañía y el reconocimiento al Mérito Artístico en Bento-Brasil, entre otros. En 1998 fundó, bajo el cobijo del Ayuntamiento de Mazatlán, la Escuela Profesional de Danza Contemporánea de Mazatlán (EPDM).
Claudia Lavista, bailarina, coreógrafa y docente, estudió en el Sistema Nacional para la Enseñanza Profesional de la Danza. Ha recibido el Premio Nacional de Danza a la mejor intérprete femenina en dos ocasiones (1988 y 2002). Además, ha creado montajes coreográficos para agrupaciones como la Compañía Nacional de Danza, la Winnipeg’s Contemporary Dancers de Canadá y Lux Boreal, entre otras.